Ante todo me han concedido la Erasmus a Praga, y desde entonces un mar de cosas recorre mi cuerpo.
No se que es la verdad, más bien son nervios, alegría, tristeza, ganas de irme, ganas de quedarme... un cúmulo de cosas que no se muy bien como explicarlas, aunque la mayor parte es alegría.
Antes de nada, tengo que aceptarla, cuando me llegue una carta a casa, y a partir de ahí empezará una carrera frenética por dejarlo todo listo lo antes posible, pero... no sé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario