La Ciudad Nueva (Nové Město en checo) es una extensión de la Ciudad Vieja que data del siglo XIV. Lo más importante que visitar es:
- La Plaza de Wenceslao centro comercial de la ciudad, coronado por la estatua de San Wenceslao. Mide 628 m de largo y va desde Můstek (el sitio donde antiguamente un puentecito cruzaba el foso que separaba la Ciudad Vieja de la Ciudad Nueva. Este puente ya no existe) cuesta arriba hasta el Museo Nacional. Aparte de estar rodeado de varios edificios representativos, es escenario de las principales manifestaciones políticas de la ciudad. Ha sido escenario de la Primavera de Praga y del inicio de la Revolución de Terciopelo. Destacar que tiene dos paradas, una que se llama Můstek y otra Muzeum en las que se puede hacer transbordo entre las líneas de metro.
- La Casa Danzante es un famoso edificio deconstructivista situado en la ribera este del río Moldava.. Fue diseñado por el gabinete de arquitectos de Frank Gehry y Vlado Milunic en 1997. Por su semejanza con una pareja de bailarines es también conocida como Ginger y Fred.
- El Teatro Nacional (Národní Divadlo en checo) es conocido como el monumento nacional de la historia y el arte checos. Es una de las instituciones culturales checas más importantes, con una tradición artística muy rica que ayudó a preservar y desarrollar las características más importantes de la nación: el idioma checo y un sentido para la manera de pensar musical y dramática checa.
- La Torre de la Pólvora es la única que queda en pié de las 13 torres defensivas que originalmente tenía la muralla fortificada de Praga en el siglo XIII, cuando se construyó. En su día fue el punto de inicio de la Ruta Real que hacían los reyes bohemios, recorriendo la ciudad medieval de Praga, pasando por la Plaza de la Ciudad Vieja , y tras llegar al Puente de Carlos y cruzar el río Moldava, se dirigían hasta el Castillo.